Los contribuyentes advierten en el organismo provincial que no reciben la documentación necesaria para cumplir con sus obligaciones fiscales, ya que la Ater optó por notificar a través de medios digitales, como la web o el correo electrónico. Sin embargo, no todos los contribuyentes cuentan con un domicilio fiscal electrónico o utilizan el email declarado, lo que agrava la situación.
El ejemplo más reciente es el vencimiento del Impuesto Automotor, que ocurrió recientemente y provocó atrasos en los pagos, lo que generó multas e intereses, incluso si el retraso es de solo un día. “Es frustrante recibir penalizaciones por un retraso que se podría haber evitado si hubiéramos recibido la notificación correspondiente”, expresó un contribuyente afectado.
Además, muchos contribuyentes señalaron que, a pesar de haber declarado un email en su momento, algunos dejaron de utilizarlo o no reciben las notificaciones adecuadas, por lo que se ven obligados a enfrentar costos adicionales.