Al inicio de la gestión provincial “había un ida y vuelta muy interesante; nos respetaban y atendían como entidad sindical”, contó Muntes, pero indicó: “Si bien muchas cosas se hablaron y se avanzó con el gobierno empezamos a tener diferencia con aquel intento de armonizar la Caja de Jubilaciones y Pensiones; luego lo del Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper); a no ponernos de acuerdo en las paritarias; y, ahora, se suma el tema de los contratos”.
En ese marco, apuntó que desde el gremio están “preocupados porque no se puede avanzar en varios puntos, entre ellos, se advierte la pérdida del poder adquisitivo y la calidad del trabajo, que son cosas que no se pueden dejar pasar”.
Disciplinamiento
“Desde el 28 de enero que esperamos normalizar el acta de compromiso que firmamos con el gobernador de la provincia, Rogelio Frigerio, del traspaso de Acunate a Consejito luego de 31 años y pareciera que vamos a ser castigados por pensar diferente y plantear cuestiones que no estamos de acuerdo”, indicó Muntes.
Ante ese escenario, Muntes remarcó que ATE “no va a ser obediente ni consecuente, es decir, no vamos a hacer absolutamente nada que no sea dentro de los carriles normales”.