

Los legisladores provinciales expresaron un “enérgico rechazo” a las decisiones del gobierno nacional de desmantelar el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) y disolver el Instituto Nacional de Semillas (Inase) y se pusieron al lado de los trabajadores de los organismos y de todos los productores “que verán afectadas sus actividades”.
Remarcaron que defienden “la investigación agropecuaria, la asistencia técnica a los productores y el desarrollo sostenible del sector, pilares fundamentales para la economía de la provincia y el bienestar del pueblo”.
La posición responde a que la eliminación de estos organismos claves, a manos de la motosierra de Milei, “pone en serio riesgo la calidad de los insumos, la transferencia de conocimientos, la innovación productiva, la fiscalización y el acompañamiento técnico a los productores agropecuarios, en especial a los pequeños y medianos, que son el motor de las economías regionales”.
En el caso del Inta, “su debilitamiento y pérdida de autonomía administrativa y financiera amenaza su capacidad de generar servicios de extensión, campos demostrativos y explotaciones piloto. El Inta no es una estructura burocrática: es un actor fundamental para el desarrollo sostenible del sector agropecuario, con una mirada regional y adaptada a las realidades locales”, dijeron.
En tanto, la disolución del Inase, “pone en jaque la calidad de las semillas, la protección de la propiedad intelectual y el cumplimiento de la Ley de Semillas. Su red regional y cercanía con los productores ha sido una herramienta imprescindible para implementar políticas públicas eficaces. Su desmantelamiento implica un grave retroceso institucional, técnico y productivo”, señalaron.
Las afirmaciones del gobierno sobre un ahorro de mil millones de pesos anuales “son, a nuestro juicio, insuficientemente justificadas y carentes de un análisis serio de las consecuencias negativas a largo plazo. Las pérdidas en productividad y competitividad generadas por la falta de control de calidad y asistencia técnica superarán ampliamente cualquier supuesto ahorro económico”, señalaron desde el bloque.
Asimismo, advirtieron que el desmantelamiento y el cierre de instituciones vinculadas a la agricultura familiar, “representan una política de abandono del desarrollo agropecuario y un atentado a la soberanía alimentaria ¿Qué clase de modelo de país se impulsa si se recorta la inversión en ciencia, tecnología y asistencia a los productores?”.
CONVERSACIÓN
