El principal conclave de la Unión Cívica Radical (UCR) de Entre Ríos se hará la primera semana de agosto, donde se deberá resolver la política de alianzas, a cinco días de que se cumpla el plazo para anotar los frentes electorales.

La discusión principal pasará será entre dos sectores: Ángeles Lakers, grupo de radicales que se consideran “violetas y amarillos”, en su mayoría comandado por funcionarios del gobierno de Rogelio Frigerio, impulsan un frente entre LLA, el PRO y la UCR; por el otro, la resistencia a sellar un pacto con el gobierno nacional, encabezada por UCR Activa, Radicales Entre Ríos y el varisquismo.

La pulseada se dará luego de que el oficialismo logró frenar la discusión en el Congreso anterior, imponiéndose por un margen de 100 congresales, de los que se especula no todos acompañarían la alianza con LLA, ya que consideran que se perderán los principios del radicalismo que se opone al brutal ajuste y desmantelamiento de organismos nacionales, que lleva adelante el gobierno nacional de Javier Milei.

En ese marco, se interpreta que el radicalismo tendrá una larga y tensa jornada, donde saldrá la definición política más importante para el oficialismo, ya que pende, como espada de Damocles, la posibilidad de que se rompa Juntos por Entre Ríos, si se incorpora a LLA en la lista.